Cúter con sierra japonesa, el serrucho japonés de bolsillo
No acaba de ser una sierra japonesa, a pesar de fabricarse en Japón y lucir dentado japonés en su hoja. De hecho, tampoco es en rigor una herramienta de carpintería. Con todo, el cúter con sierra japonesa que nos ocupa es muy valioso en tareas de ebanistería, carpintería y bricolaje.
¿Vale la pena llevar en la caja de herramientas este tipo de cúter? Hableremos de ello en este artículo.
La diferencia entre el serrucho japonés y el europeo
¿Cómo funciona una sierra japonesa? El serrucho japonés corta al tirar. El europeo, en cambio, sierra la madera durante el movimiento de avance, retrocede, pues, sin cortar.
Para muestra, un botón. He aquí la sierracúter OLFA HSW-1, con dentado japonés en su hoja retráctil:
Características de la sierracúter japonesa Olfa HSW-1
Aunque lo parezca, no se trata de un simple cutter. De hecho, si bien acepta hojas estándar, el OLFA HSW-1 consiste más bien en una sierra japonesa de bolsillo, cuya hoja permanece afilada con el correr del tiempo gracias al niquelado químico, un tratamiento especial del acero.
También llamada ENP (Electroless Nickel Plating), esta técnica industrial deposita una aleación de níquel sobre la hoja sin aplicar corriente eléctrica. ¿Y cuáles son las ventajas del revestimiento del acero por niquelado químico? Helas aquí:
- buena resistencia a la corrosión, la abrasión y el desgaste
- ductilidad del material sin perder propiedades eléctricas
- alta dureza, sobre todo después del tratamiento térmico
- buena soldabilidad
- uniformidad del baño de níquel, también en esquinas, poros y aristas
Medidas
La hoja de esta minisierra japonesa de bolsillo mide 106 mm de largo por 25 mm de ancho. Eso quiere decir que la sierracúter es compatible con hojas lisas segmentadas, es decir, las cuchillas de toda la vida para cúter ancho.
Hojas de repuesto
Los recambios segmentables originales de OLFA se identifican con las referencias HB y HBB. La hoja de repuesto con dentado japonés, por su parte, lleva el código HSWB-1.
Propiedades
¿Cómo se bloquea la hoja de la sierra de bolsillo Olfa HSW-1? La inmoviliza una rueda en la base de la cuchilla. Para evitar que el mecanismo se afloje durante el corte, un resorte de trinquete, con su peculiar sonido de heramienta de carraca, retiene el propio dial.
El portacuchillas, construido en acero inoxidable, nace en la base de la herramienta, como en los mejores cuchillos de cocina. Además, se prolonga más allá del plástico, lo que sirve para sustentar la hoja.
Si volteas la herramienta, encontrarás una almohadilla de caucho que amortigua la parte posterior del serrucho. Dicha goma negra mejora sobremanera el agarre del cúter.
En cuanto a la hoja, el acero se endurece por inducción. Su afilado es extremo. Mide 0.5 mm de grosor salvo en la zona de los dientes, donde crece hasta los 0.7 mm, aumento que se debe al triscado.
Varias conclusiones sobre la herramienta
La sierra japonesa Olfa es una herramienta manual ideal para manualidades. Pero no te dejes llevar por las apariencias... Porque el serrucho Olfa HSW-1 no es solo apto para cortar cartulina o cartón, antes bien, es en grado sumo eficaz para cortar plástico y madera.
De hecho, por su dentado japonés, el cúter resulta magnífico en cortes a veta y a contraveta en carpintería, marquetería y ebanistería. Si construyes tus propios muebles y fabricas tus propios tapones de madera para ocultar los tornillos, no encontrarás una mejor herramienta con que cortarlos.
En síntesis, considera la sierracúter una sierra de bolsillo más precisa que el serrucho de pladur y más compacta que el serrucho japonés.
- Para proyectos de bricolaje, construcción, trabajos industriales, artesanía, manualidades...
- Cuchilla con dentado japonés de 25 × 0.5 mm bloqueable por rueda
- Compatible con hojas Olfa HB, HBB y HSWB-1/1B
- Mango recto con dorso de goma para un buen agarre
- Opiniones
A modo de colofón, la leyenda del Yeti vasco y san Martinico
Según cuenta la leyenda vasca, el Señor de los Bosques, llamado Baxajaun en Euskadi y Bosnerau en el Pirineo central inventó el serrucho de carpintería. A decir verdad, habría que matizar que su hallazgo fue accidental; así pues, la obra del Yeti vasco, el triscado del diente, fue antes descubrimiento que invención.
La intención del personaje mitológico era muy distinta. Porque, en realidad, solo quería arruinar el trabajo del maestro carpintero san Martinico, cuyo serrucho era considerado por el munstruo una amenaza para los árboles. Pero el tiro le salió por la culata y, lejos de inutilizar la herramienta, ¡la mejoró!
El Yeti dobló cada diente de la sierra de forma alternativa. Uno a la derecha, el otro a la izquierda. Así sucesivamente. Lo que ignoraba es que ese acto de sabotaje, aparte de facilitar la salida de la viruta y el serrín, iba a reducir la fricción de la madera en la garganta de corte.
Ahora bien, ¿y si hubiese invertido el sentido de corte de la hoja? Habría inventado entonces el serrucho japonés. ¡Mala suerte la del Baxajaun!
